Aprovechando que hoy en día es posible usar un portátil en el avión y sobre todo por aquello de optimizar el tiempo, estoy utilizando mi vuelo de regreso a España para escribir este pre-post. Lo cierto es que una vez más, las tecnologías hacen más amena la vida y los viajes como en esta ocasión, aunque no todo el tiempo que dure el vuelo (debido principalmente a la duración de mi batería -alrededor de una hora y media-) pero sin gran parte del mismo. Como indicaba en mi ultimo post, estos días he estado en compañía de unos amigos visitando algunos lugares de Irlanda (Belfast, Calzada del Gigante, Clifs of Moher, Galway y por último Dublín). La primera impresión que he sacado es que efectivamente es muy complicado visitar tantos lugares, y el viaje ha sido agotador, más cuando no he dormido ni un minuto en el coche (principalmente porque he conducido) y porque además es algo que muy pocas veces he podido hacer -igual me ocurrre en un avión- Aunque todos los lugares son muy bonitos, creo que si debo elegir alguno, me quedo con los Clifs of Moher, tanto por lo impresionante del paisaje, como la fuerza que tiene el viento, incluso dando algo de miedo. AVISO A NAVEGANTES: Mucho ojo con las puertas de los coches, que es tan fuerte que es posible que se lleve la puerta -y lo digo especialmente por un amigo ;-) Mi vuelta a España, es solo provisional, ya que con bastante seguridad y si no surge nada distinto, me volveré próximamente a Dublín, en esta ocasión con la intención de permanecer en esa acogedora ciudad al menos un par de años.
domingo, 10 de diciembre de 2006
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